HISTORIA DEL GRANADA C.F.
Capitulo 70
Temporada 2001-02
CONSUMATUM EST
Podemos recurrir a la ley de
Murphy: “si algo puede ir peor, irá peor”, o al refranero popular, “tanto va el
cántaro a la fuente que se acaba rompiendo”; “quien mal anda mal acaba”; “nunca
digas de ese agua no beberé”. Todo vale para definir una temporada penosa en lo
deportivo y nefasta en lo administrativo. Se llega al 30 de junio con la
impresión de que, como siempre, se salvarán los muebles en última instancia y
alguien vendrá para poner el dinero necesario y que
Pero todo eso del descenso
ocurrió en agosto de 2002, o sea, en la próxima temporada. Mi compañero en esta
aventura literario-futbolística, José Luis Ramos Torres, se encargará de
contarla. Por ahora tenemos que fijarnos en la 2001-2002, donde se cocieron las
malas hierbas que llevaron al envenenamiento colectivo del Granada. Por eso
este capítulo lleva el titulo de “Consumatum est”. Todo está consumado. Solo
falta la muerte en forma de descenso, que llegará en agosto. Pero el mal se ha
fraguado antes. En esta temporada que podemos definir como la de “las cuatro
fases”. Cuatro fases muy claras llenas de alternativas, sobresaltos y
desilusiones, que fueron llegando con una plantilla de ¡32 jugadores
nuevos! Es evidente que Jimena sigue e incluso supera aquellas locuras de
Cándido Gómez.
Las cuatro fases de la temporada
1ª. Con Muñiz ganando
Comenzó la temporada con
Lalo de secretario técnico. Buscó entrenador y encontró a un antiguo amigo
y paisano, Manuel Ángel Muñiz, que llevaba un año en el paro tras haber
sido técnico en categorías inferiores del Sporting de Gijón y ayudante de
Lalo en el Avilés. Hay que ahorrar y se busca un preparador físico que haga
también las veces de segundo entrenador. La persona que reúne este perfil es
el ex jugador accitano, Pedro Muro.
Y se ficha un total de 32 futbolistas; de ellos llegaron 25 antes de empezar la
temporada, que se sumaron a los seis supervivientes de la pasada (Linares,
Rubén Linares, Garrido, Moya, Triana y Fran Álvarez). En el mercado de invierno
vinieron siete y se dio la baja a seis. O sea, que la plantilla fue de 31
jugadores y dos sin ficha diligenciada, al principio, para subir a
Muñiz empezó
Muñiz ha mantenido
en la meta a Linares con una línea de cuatro defensas, donde Alberto
es el pilar principal junto a Moya, cuando puede volver a jugar, mientras que
los laterales son para Garrido y Triana o Figini. En el centro del campo están
Nacho Jara, Antonio Díaz y Camacho, mientras que en el ataque los habituales
son Fran Álvarez, Dezzotti y Benavides.
2ª. Con Muñiz perdiendo
Pero a partir de la 7ª jornada el equipo se precipita en caída libre. El Granada, dicho sea en palabras del periodista Justo Ruiz, “consigue” a 12 de diciembre su peor racha en 2ª B, con nueve jornadas sin ganar y con sólo cuatro goles a favor. El último partido de esa racha fatídica ya no lo dirige Muñiz, que ha sido despedido el 5 de diciembre. El director general Nogueras que lo había confirmado el día antes, se sorprende ante el anuncio de Jimena respecto al cese del técnico. Nogueras se traga sus palabras, dice que él no dimitirá por eso, y justifica el acontecimiento porque “siempre puede haber un cambio de opinión del presidente”.
3ª. Con Blanco ganando
El 6 de diciembre, Ramón Blanco es el nuevo entrenador, el segundo de la temporada, que intenta infundir esperanza ya que “estoy convencido de que hay plantilla para no hacerlo tan mal como hasta ahora”. Y justifica la marcha en la liga con la excusa de que “el equipo está descompensado, hay muchos de banda derecha y pocos zurdos”. Y aunque pierde su primer partido, a partir del siguiente, cuando se gana en San Fernando, cambia un poco el panorama de la mano del técnico gaditano. Que sin embargo arrastra otra racha difícil con cuatro derrotas, un empate y solo dos victorias.
A partir del 1de febrero,
los nuevos fichajes cambian la cara del Granada, que gana al Almería
por 1-0. Son los importantísimos refuerzos invernales del portero Rómoli,
el defensa Gustavo de
4ª. Con Blanco perdiendo
Y llega entonces la
inesperada debacle final donde se pierde pronto toda esperanza de ascenso
y se enhebran cinco derrotas, un empate y una solitaria victoria que deja al
Granada en un desconsolador 10º puesto con 50 puntos. La derrota en casa del 14
de abril, ante el Sevilla B, justo el día que se suponía que el club
cumplía 71 años (según recordó una pancarta de la peña Los Cármenes) fue el
detonante que alejó cualquier esperanza de liguilla de ascenso y que propició
la sonora bronca al presidente de los desesperados socios, que se vinieron
abajo un año más. Los jugadores, los técnicos y la directiva también se
desfondaron en los tristes partidos finales de
La directiva del Granada y su moderno “organigrama”
Francisco Jimena había encargado a la empresa “Human Development” el área de marketing, publicidad y comunicación del Granada C.F. Esta empresa cuenta con José Ángel Molina y José Manuel Guadalupe en la dirección general, acompañados por Manuel Ángel Muñiz en el área deportiva y Carlos Dorador, Rafael Martínez y Jose Alberto Orantes en la de marketing. Su lema de lanzamiento afirma, o al menos desea, que “Este es el año del Granada”. Lamentable predicción porque efectivamente lo fue ¡con el descenso final a Tercera División!
La junta directiva cuenta con un nuevo vicepresidente desde el 5 de octubre. Ignacio Nogueras Rodríguez, es además portavoz oficial. Pero el día 19 cambia su título de vicepresidente, que no podía desempeñar al no ser socio, por el de Director General. Entre sus proyectos inmediatos está el de conseguir que la directiva se reúna cada 15 días, una sana costumbre que se había perdido. También anuncia los contactos con el Patronato Municipal de Deportes para un nuevo acuerdo de gestión y utilización de los Cármenes. Y deja caer la noticia de que se mantienen gestiones para encontrar otra instalación donde entrenar.
El regreso de “los grupos inversores”
Son como marcianos que se abaten sobre la ciudad de Granada con sus naves espaciales. Tienen distintos nombres y procedencias y todos coinciden en su sapiencia empresarial y sus modernos métodos para obtener dinero, lograr triunfos y hacer que el Granada resurja de sus cenizas. Nos centramos en el análisis de dos de estos inversores que también podrían llamarse “invasores”.
El primero
Hasta el 16 de marzo duró
Ignacio Nogueras en la dirección general. Quizás se fuera cuando supo de las
gestiones que el presidente había iniciado con un grupo de empresarios
granadinos, presidido por José Manuel López Torres. El grupo ofrece una
aportación de 120.202,42 euros, antes del 30 de abril, que servirán para
pagar los cinco meses que se deben a la plantilla. A cambio se firmará un
contrato por cinco años para explotar el patrocinio de las camisetas y
pantalones, el marketing, las giras, los partidos amistosos… y los traspasos de
jugadores. El Granada recibirá el 50% de todo lo ingresado por estos
conceptos, menos en los posibles traspasos en cuyo caso el porcentaje subirá
hasta el 65-70%. Si se rompe unilateralmente el contrato, el Granada pagaría
600.000 euros o renunciaría a los ingresos anteriormente descritos.
La parcela deportiva estará, en su parte técnica, a cargo de Mario Luna como director deportivo. Luna estaba recientemente en el Santander actuando de segundo entrenador y encargado de fichajes sudamericanos. La gestión económica administrativa del área deportiva estará a cargo de López Torres. Ante estas noticias, y como siguen sin cobrar, el 5 de abril se manifiestan los jugadores con pancartas ante la puerta del club. Se entrevistan con López Torres, que parece actuar como si su contrato se hubiera firmado, pese a que tres directivos han dimitido por no estar conformes con los términos del acuerdo con el grupo de López Torres. Y ese mismo día se rompen las negociaciones. Un indignado López Torres dice que ha sido una ruptura de última hora y que Jimena ha intentado engañarles.
El 18 de mayo, cuando la Liga está a un día de terminar, Jimena llega a un acuerdo con Pepe Parejo y Antonio Raya para que sean la próxima temporada entrenador y director deportivo respectivamente, de un Granada que todavía mantiene su categoría de 2ª B y donde nadie parece temer la inminente catástrofe.
Y el segundo
Un mes más tarde, el 14 de junio, parece haber un acuerdo con un grupo inversor español que representa el periodista granadino Antonio López Somoza, que afirma tener todo acordado y rematado, aunque el pasivo del club ronda los 900 millones de pesetas. El propio López Somoza será el director general y quizás Carlos Orúe, un técnico cotizado, sea el entrenador. Matiza Somoza que antes debe hablar con Parejo y Raya, que se han quedado sorprendidos y paralizados en sus gestiones para formar la próxima plantilla. La semana siguiente, aparece López Somoza para decir que Jimena ha dado un paso atrás en el último momento. De lo dicho no hay nada. Parejo y Raya vuelven al candelero y siguen trabajando.
Los filiales
Otra historia en tres fases es la de los conjuntos filiales del Granada. Intento resumirla.
Empieza Manuel Torres Molina
El conjunto de filiales
tiene siete equipos en competición. El Granada B, dirigido por Manuel Torres
Molina apenas cuenta, el 11 de agosto, con siete jugadores fichados y otros
siete a prueba. Ninguno de los que hicieron la pretemporada con el Granada se
quedará en el Granada B. No tienen campo para entrenar y “por ahora nos colamos
en el de
Y comienza la Liga de
Regional Preferente. En las primeras cinco jornadas el equipo no conoce la
victoria y dimite Manuel Torres Molina al comprobar que Lalo le está buscando
sustituto. Se va a regañadientes porque “la temporada pasada también
tuvimos un mal comienzo y luego estuvimos 16 partidos sin perder”.
Ida y vuelta de Lázaro
El 12 de octubre Gabriel Rosario Lázaro se hace cargo del Granada B. Se han incorporado los jugadores Urquiza, Cristian, Alberto, Donaire y Santi. Y se han ido otros. Pero Lázaro dura poco. Su primer partido, en Íllora, provoca serios problemas con Lalo y el día 20 dimite porque el Granada B no juega sus partidos en los Cármenes y ni siquiera disputa los partidos de entrenamiento de los jueves con el primer equipo. Recuerda que en el filial hay un grupo de jugadores aptos para el Granada, como son Cristóbal, Rubén Linares, Barros y Vinuesa.
Sigue el vaivén de cambios porque el día 21 se dice que Lázaro no se va y que Figueroa se incorpora como preparador físico. Pero el 31 de octubre llega el final del culebrón: Lázaro tiene un grave enfrentamiento con Muñiz, el entrenador del primer equipo, en un medio de comunicación local, y eso es el detonante final para su cese. Y como Lázaro solo tenía un compromiso verbal con el presidente, no cobrará por el despido. La situación no puede ser peor y culmina el 5 noviembre con la esperpéntica imagen del Granada B en la liga de Preferente, cuando un grupo de jugadores se presentan para jugar contra el Santa Fe sin entrenador ni preparador físico. Estuvo Lalo, pero no intervino. Los jugadores se organizaron solos tras llamar por teléfono a los que no habían sido convocados y a tres juveniles. Acabaron perdiendo por 2-0 y al día siguiente se presentaron en el club y amenazaron con marcharse, levaban tres meses sin cobrar y nadie les hacía caso.
José María Rodríguez y Eladio Velasco
Para remediar el desastre, el 9 de noviembre se incorporan a los filiales Eladio Velasco, como directivo, y José María Rodríguez como entrenador, aunque no puede figurar oficialmente porque ya estuvo esta temporada con el Arenas. Vuelve más o menos la normalidad, aunque Eladio Velasco dimite el 14 de marzo y algunos jugadores del filial tienen una minima compensación al jugar un partido oficial de la Copa Federación con el primer equipo del club. Son Carlos Antonaya, Sebas, Quini, Trujillo, Bustos, Barros, Caparrós, Sillero y Óscar.
También en el equipo Juvenil Nacional hubo una dimisión el 4 de diciembre, su entrenador, Antonio Amigo, se va simplemente “por falta de atención”. Penoso y desmoralizador motivo que dice muchas cosas sobre la actitud y la organización del club.
En el torneo de
* Moya pasó un calvario de seis meses hasta que se resolvió favorablemente su caso. Desde que en el pasado mes de abril se descubrieron irregularidades en su pasaporte italiano, su ficha fue retirada cautelarmente y no había jugado más. La sentencia salió el uno de agosto y el juez único del Comité de Competición le sancionó con seis meses de paro. Por fin, el 22 de septiembre ya tiene ficha federativa tras arreglar sus problemas. Es la ficha 22 que completa la plantilla y el jugador respira porque “han sido cuatro meses de pesadilla”. Realmente alguno más porque estuvo sin jugar desde el 1 de abril hasta el 23 de septiembre.
* Precios de abonos para los hombres de
* Pero es que las
penurias habían comenzado desde la cutre concentración de una semana en un
hotel de Armilla y los despistes horarios para los entrenamientos. Fue el 3 de
agosto, en plana canícula, cuando toda la plantilla con su equipo técnico al
frente se presentó a las seis de la tarde en las puertas de
* El 30 de noviembre, el Granada tiene psicóloga, Se llama Patricia Ramírez. Y anuncia cuál será su plan de preparación psicológica; -“Media hora antes del partido contra el Sevilla B haremos una sesión de 10-15 minutos en la que cada jugador visualizará la táctica y las acciones que debe desarrollar durante el encuentro. Todas ellas deben finalizar con éxito y estarán acompañadas de un mensaje positivo.” El Granada perdió por uno a cero. Ernesto Martínez tituló su crónica de Ideal con dos palabras; “Deporte sicológico” y Patricia Ramírez descubrió que su sistema no era demasiado efectivo por algo tan evidente como su frase lapidaria: “está claro que hace falta un delantero”. No parece una deducción muy novedosa, aunque quizás influyera en el ánimo del presidente para fichar al delantero uruguayo Juanchi González en el mercado de diciembre. Lo cierto es que de la psicóloga nunca más se supo.
*Días de luto en el seno del club y las mentes de los viejos aficionados. Cuatro muertes sentidas de cuatro personajes. El 12 de septiembre, Manolo Almagro Díaz, genial futbolista granadino. El 18 de septiembre, un ex presidente muy querido, Jose Bailón Verdejo, que con sus 87 años fue siempre el “presidente de la sonrisa”. El 22 de diciembre, un técnico del fútbol granadino de larga trayectoria y categoría: Paco Villegas Lermo. Y el 21 de enero de 2002, el brasileño Vavá, que fuera entrenador del Granada y campeón del mundo con la selección de su país. Un infarto se lo llevó a los 67 años.
* Es posible que fuera una “serpiente de verano” o una simple broma. Pero lo cierto es que el 19 de julio de 2001 se escribió en “Ideal” que “los socios Rafael Salcedo, Antonio Martínez Casado y Luis Fernández se constituyen en alternativa permanente a la actual directiva”. Por lo pronto ya tienen contacto con un grupo argentino del presentador de televisión Tinelli, que estuvo en Granada hace un año cuando se debían 400 millones y ni siquiera le recibió el presidente. La experiencia de Tinelli, cuando compró el Badajoz con un fracaso descomunal, no hace añorar, precisamente, esa posibilidad de que el grupo que preside recale en el Granada. Pero los de la “alternativa permanente” también tienen contactos con el grupo Samper que gestiona el Murcia.
* Cuando las cosas se hacen
mal deben esperarse reacciones en contra. Y así, al final de temporada, el
Ayuntamiento, cansado de ver el mal estado de Los Cármenes, anuncia
que tomará nuevamente el control de su mantenimiento. A nivel
dirigencial el movimiento antijimena se canaliza, desde el 19 de febrero de
2002, por medio del socio José María Medina Jorges, que fue precandidato a la
presidencia en las últimas elecciones y ahora anuncia que prepara una moción de
censura contra la directiva. Habrá que esperar unos cuantos meses para saber su
resultado.
LOS QUE HICIERON HISTORIA EN EL GRANADA C.F.
Francisco Jimena Ruiz
No fue un "héroe" rojiblanco ni dejó un grato recuerdo en los aficionados. Más bien fue un "antihéroe" que consiguió lo que ninguno de los presidentes que ha tenido el club a lo largo de su historia. Desde aquel ebanista y escultor de la madera que se llamó Julio López sólo Francisco Jimena ha logrado la insólita "hazaña" de bajarlo a las profundidades del cuarto nivel del fútbol español y lo ha logrado además sin necesidad de pasar por la vergüenza de una derrota en el terreno de juego. El "mérito" inmenso de Francisco Jimena está en haber hundido al Granada C.F. sin jugar al fútbol. Simplemente por aferrarse al cargo, no pagar a los jugadores y despreocuparse de forma suicida del inminente peligro que se cernía sobre el club.
El culpable del desaguisado que supuso un descenso "administrativo" hasta Tercera división, tiene nombre y apellidos y lo respaldan unas cifras que denuncian su horrible gestión. Y es una responsabilidad no compartida con nadie ya que viene generada por sus escasos conocimientos económicos y deportivos, su lamentable falta de decisión, su ausencia total de ideas para generar fondos y su extraña habilidad para cansar hasta la extenuación a autoridades, empresarios, prensa y aficionados que podrían haber ayudado si se les hubiera planteado algo serio y concreto.
Jimena no se hizo más popular, más rico ni más simpático con el Granada C.F. Más bien lo contrario. Entonces ¿por qué ese apego a un cargo que solo da disgustos?, ¿por qué ese afán de engañar a todos hasta el final y perderlo todo sin gloria? La ley de Peter se cumplió ineludiblemente y Francisco Jimena demostró con creces que la presidencia del Granada C.F. sobrepasaba su nivel de incompetencia. Pero tardó cuatro temporadas en irse, tras despilfarrar muchos millones de pesetas en fichar más de cien jugadores y despedir a la cuarta parte de ellos a mitad de temporada. No creó un mínimo cuerpo técnico, se cargó a los equipos filiales y no generó ni una sola fuente atípica de ingresos. Además, auspició situaciones esperpénticas con fantasmagóricos "grupos inversores" que no invertían nada y fue el culpable de las idas y venidas de Aguirre Suárez como "mágico" salvador de una situación que fue empeorando día tras día.
Por eso hay que preguntarse:
¿Habrá algo que haya hecho bien el señor Jimena? Creo que no y, salvo que
alguien rebusque y encuentre un mínimo acierto en su gestión de cuatro
años, hay que calificar a Francisco Jimena, que como persona merece todos
nuestros respetos, como el peor presidente de la historia del Granada C.F.