HISTORIA DEL GRANADA CF
Capítulo 90
Temporada 2021-22
DE EUROPA AL POZO
Revolución fracasada
La temporada anterior, la 2020-21,
fue la mejor de todas las de la nonagenaria historia del Granada CF, que por
primera vez participó en una competición internacional y además lo hizo
brillantemente, no como mero comparsa, alcanzando los IV de final de Europa
League. Un año después la realidad del club es muy otra para lamento del forofo
rojiblanco. En la 20-21 nuestro equipo hablaba de tú a equipos de rancio
abolengo balompédico internacional. Sólo un año después de asomarse a Europa,
el GCF ha vuelto a segunda tras completar la cuarta peor campaña de las ya 26
de primera, culminada con el descenso de categoría.
La clave del
fracaso muy bien puede residir en la revolución a nivel administrativo y
deportivo con que se inició el ejercicio. Una revolución que, a la vista está,
no ha salido bien. Cuando algo funciona es de sentido común cambiar sólo lo que
sea imprescindible, sin embargo, desde la dirección del club se liquidó al trio
principal responsable de los éxitos cosechados, sustituyéndolo por otros que a
lo largo del ejercicio acreditaron no estar preparados para gestionar lo que
tenían entre manos. Para quien lo mira desde fuera, la cosa está clara:
prescindir de Fernández Monterrubio, Fran Sánchez y, sobre todo, Diego Martínez,
fue un grave error. Los tres llevaban ya varios años, cada uno en su parcela,
dirigiendo con acierto los destinos del club, por contra, sus sustitutos no han
aguantado uno completo pues en el momento de redactar estas notas, final de la
temporada 21-22, ni Patricia Rodríguez, ni Pep Boada ni Robert Moreno, los que
vinieron a sustituir a los antes nombrados, pertenecen ya al club, arrastrados
por el fracaso con que todo ha concluido.
Es cierto
que Diego Martínez acabó marchándose por voluntad propia, pero en su despedida
influyó más que ningún otro factor el hecho de que para la temporada recién
terminada la política del club iba a estar regida por la austeridad, o eso se
proclamó desde la dirección, o sea, difícilmente se podría aspirar a repetir
éxitos ya que no estarían hombres que fueron básicos para lograrlos. En aras
del ahorro, al final, la austeridad ha costado muy cara.
A principios
del anterior ejercicio ya hubo otra revolución, ésta en las altas esferas, por
la que salió del club el presidente John Jiang. La presidencia pasó a
detentarla, al menos nominalmente, el compatriota del anterior Rentao Yi,
hombre conocido por estos pagos sólo por las fotos de su rostro y que muy
posiblemente no sepa situar Granada en un mapa. Como miembros del consejo de
administración de la SAD vinieron Juan-Sophia Yang (quien ya estuvo en la
nefasta 16-17), y Lingxiao
Yu, vicepresidente, otro desconocido a la vera de la Alhambra.
El mensaje lanzado a la afición por la nueva
cúpula directiva fue el de que su labor iba a girar en torno a un plan sostenible y
duradero de crecimiento a largo plazo que consolide a nuestro equipo en máxima
categoría. Como declaración de intenciones está bien, pero, a la vista de los
resultados, más suena a frase hecha y vacía de contenido que a otra cosa, aun
reconociendo que esas intenciones fueron todo lo buenas que cabe suponer y
cargando las culpas sólo en la falta de experiencia y conocimientos
futbolísticos de quienes adoptaron decisiones tan perjudiciales para la
entidad.
Austeridad y fuga
Como queda dicho,
desde la dirección del club se transmitió que la austeridad presidiría todas
las acciones debido a que la economía estaba lastrada por causa de las
amortizaciones pendientes de los varios efectivos fichados la temporada anterior.
Esa austeridad pregonada,
traducida en la imposibilidad de retener, por razones económicas, a
determinadas piezas fundamentales del equipo, llámense los cedidos Yangel
Herrera y Kenedy, fue la causante, nos sigue pareciendo desde fuera, de que el
míster, Diego Martínez, prefiriera quedarse un año en paro antes que renovar
por otra temporada al frente del banquillo rojiblanco.
Pocos días después de la marcha de
Diego Martínez, Soldado, que había renovado por otro ejercicio, abonó su económica
cláusula de rescisión y fichó por el Levante. Además, el portero Rui Silva al
cumplir su contrato se marchó al Betis sin dejar ni un euro en las arcas. Y para
completar la desbandada, con la liga ya en su tercera jornada Foulquier fue
traspasado al Valencia.
Demasiadas
bajas de hombres importantes que debilitaron significativamente el equipo. Pero
lo peor y sin duda más determinante, siempre a juicio de quienes suscribimos
este resumen de la 21-22, es que otros que se quedaron, en la práctica fue como
si también se hubieran ido porque no estuvieron a la altura de lo que sabemos
que podían haber rendido: Machís el primero, una sombra de lo que fue, al
parecer más preocupado por sus problemas personales que por su rendimiento como
futbolista profesional, que experimentó un bajón de juego y de presencias en el
once rojiblanco; Gonalons, otro que tal, con varias actuaciones grises tirando
a muy oscuras, y eso las pocas veces que pudo ser utilizado pues gran parte del
campeonato estuvo inactivo por diferentes lesiones; además, Domingos Duarte fue
otro que estuvo muy por debajo de su nivel de temporadas pasadas, media liga
lesionado para volver en un bajísimo estado de forma y sólo entonarse ya en la
recta final. También hay que añadir a esta lista de presentes-ausentes a los
veteranos Germán y Montoro, muy lejos de lo que de ellos podía esperarse y nos
tenían acostumbrados. De ellos, en principio, sólo Duarte continuará para la
22-23, todos los demás ya han causado baja.
Únase a ese
explosivo cóctel la escasísima aportación de la mayoría de los abundantes
fichajes y sumen a todo lo expuesto el desacierto en la elección del técnico
contratado para suplir a Diego Martínez: Robert Moreno, cuyos bandazos incompetentes
e inexpertos en la dirección del equipo fueron evidentes desde los primeros
compases, cesado demasiado tarde y con poco margen de enmienda.
Robert Moreno
Ya estaba apalabrado de antes, pero poco
después de cerrar al nuevo director deportivo se contrató por dos temporadas al
nuevo míster, el hospitalense Robert Moreno González, segundo que lo fue de
Luis Enrique en Roma, Celta, Barcelona y la Selección Española. Unos pocos
partidos al frente del combinado nacional, mientras Luis Enrique estuvo
apartado del cargo por cuestiones familiares, y un breve periodo al frente del
Mónaco eran todo su bagaje como primer entrenador antes de desembarcar en
Granada.
El nuevo míster quiso que el Granada
practicara un juego vistoso basado en el buen trato del balón, fundamentado en la
posesión y la presión, algo que ya pudimos ver en los pocos partidos en que
ejerció de seleccionador y que, por otro lado, es lo que caracteriza a los
equipos de la zona alta de la tabla. Moreno quiso que el Granada, practicando el
4-3-3, se pareciera al Madrid o el Barcelona, y siempre sacara el balón jugado
desde la defensa, nada de pelotazos. Pero la terca realidad en forma de malos
resultados pronto le obligaron a cambiar el sistema de juego (5-3-2-1, 4-4-2),
e intentar ir a lo práctico, que tampoco nuestro equipo estuvo nunca integrado
por virtuosos del balón.
Con el catalán en el banquillo, los
comienzos ligueros del Granada fueron francamente malos y en la jornada 6 ya
ocupaba puesto de descenso. La primera victoria, en la jornada 8, dio paso a
una etapa de mejora y más adelante logró encadenar siete jornadas seguidas sin
conocer la derrota, que abrieron un cómodo colchón con los puestos de pérdida
de categoría. Así se llegó al final de la primera vuelta. Pero la distancia
sobre el descenso quedó dilapidada al empezar la segunda vuelta con una racha
de cinco derrotas consecutivas y un único punto de 21 posibles. Para cuando el
Granada fue derrotado en Valencia 3-1, jornada 27, ya sólo un punto lo separaba
del 18º. En ese momento se tomó la decisión de despedir a Robert Moreno.
Para entonces la marcha de Moreno
había sido numerosas veces pedida por la grada. Especialmente después de los
pésimos partidos en Los Cármenes frente a Osasuna, Villarreal y Cádiz, que
forman parte de la nefasta racha de la segunda vuelta, aunque eso de pedir la
cabeza de Moreno ya lo había coreado el respetable otras tantas veces y casi
desde el primer partido como local pues nunca el catalán gozó de las simpatías
del forofismo. Sólo cuando el equipo encadenó buenos resultados y se alejó de
la zona de descenso cesaron transitoriamente los gritos anti Robert. Una mala
imagen del míster empeorada por los comentarios en sus comparecencias
mediáticas pos partido, en los que dejaba entrever cierta prepotencia y
altanería.
A toro pasado, parece muy claro que
la decisión de cesar al técnico se tomó demasiado tarde y que debió adoptarse
al menos un mes antes para intentar romper una dinámica negativa de caída libre
que hacía presagiar lo peor, y también porque era patente que los jugadores no
respaldaban a su entrenador.
Seguramente Robert Moreno no es tan
mal entrenador como indica su deficiente papel al frente de nuestro equipo,
aunque lo que sí que ha evidenciado en su aventura granadina es que le falta
experiencia y humildad para dirigir equipos modestos pues no es lo mismo
ponerse al frente de la Selección o de todo un poderoso Mónaco que tener que
lidiar con jugadores del montón, dicho sea esto con el más absoluto respeto
para con los integrantes de la plantilla rojiblanca en esta desgraciada 21-22.
Algo parecido a lo que ocurrió en otra temporada olvidable, la 75-76, con
Miguel Muñoz al frente de la nave rojiblanca.
Fichajes de verano
El primer
fichaje cara a la 21-22 fue el de Bacca, que firmó por una temporada. Un delantero
centro colombiano de 34 años con la vitola de crack que le da un pasado muy
goleador acreditado en equipos como Sevilla, Milán y Villarreal. La experiencia
muy positiva de delanteros veteranos a coste cero que supusieron los fichajes
de Soldado y Jorge Molina se quiso repetir con Bacca, pero mientras los otros
dos demostraron que a pesar de su veteranía aún les quedaba mucho fútbol en sus
botas, con Bacca ha sucedido lo contrario y lo único que ha demostrado es el imparable
declive de su carrera como futbolista, y los tres técnicos que se sentaron en
el banquillo rojiblanco lo relegaron sistemáticamente a la suplencia. Su
participación se reduce a 19 partidos entre liga y copa y un único gol, de
penalti y frente a un equipo canario de regional.
Casi a la vez que el anterior fichó
por tres temporadas Monchu, mallorquín perteneciente al Barcelona, que se
guardó el derecho de recompra así como un porcentaje sobre un futuro traspaso,
y que venía de cesión al Gerona. Centrocampista de 21 años que se vendió como
el sustituto de Yangel Herrera y que empezó como titular pero pronto perdió tal
condición al ser evidente que la primera categoría le venía grande. Sólo 16
partidos ha jugado de rojiblanco entre liga y copa, siendo cortado en el
mercado de invierno y cedido al Valladolid, de segunda, club al que finalmente
ha salido traspasado tras ascender el equipo castellano-leonés.
El siguiente fue el defensa central
peruano Abram, internacional, de 25 años, procedente del Vélez Sarsfield
argentino. Venía libre tras terminar contrato y en el momento de su fichaje,
por tres temporadas, se dijo de él que era uno de los mejores futbolistas de
Perú, pero nada más que en ocho partidos de liga y dos de copa ha vestido de
rojiblanco, saliendo en el mercado invernal cedido al Cruz Azul mejicano por un
año.
Con la liga ya jugándose re-fichaba
por el Granada, por dos temporadas, Rochina, tras quedar libre en el Levante.
Entre 2014 y 2016 ya perteneció a nuestro equipo, del que salió traspasado al
Rubin Kazan ruso dejando muy buen recuerdo entre la afición. A sus 30 años,
puso gran interés por volver a nuestra tierra, rebajando incluso sus
emolumentos para facilitarlo. Un gran partido en el campo del que fue su
equipo, el Levante, y un gol de “rochinazo” al Sevilla casi se puede decir que
fueron sus únicas aportaciones a la causa rojiblanca. Una lesión le impidió
participar en el último tercio del campeonato.
Tras jugarse las dos primeras
jornadas, Foulquier se marchaba traspasado al Valencia por 2,6 millones € e
inmediatamente el Granada cerraba la incorporación del lateral derecho
colombiano internacional Santiago Arias, cedido por el At. Madrid (sin opción
de compra) y con pasado en equipos europeos punteros como Sporting de Lisboa,
PSV Eindhoven y Bayer Leverkusen. Con 29 años y pocos minutos en los dos
últimos ejercicios por una grave lesión, en el Granada volvió a lesionarse y
sólo ha jugado 14 encuentros entre liga y copa.
En el mismo día de cierre del mercado
veraniego vino Escudero, veterano (31) lateral izquierdo procedente del
Sevilla, club en el que había quedado libre. En principio no se contó mucho con
él, saliendo casi siempre como relevo, pero la lesión de Neva le otorgó la
titularidad en la recta final del campeonato. Ha sido aceptable su aportación.
Todos los anteriores llegaron sin que
hubiera que desembolsar cantidad alguna por su fichaje. No es el caso del
portero luso Maximiano, comprado al Sporting de Lisboa por 4,5 millones de
euros. No era la primera opción para la portería, pero no lo íbamos a lamentar
porque Luis Manuel Arantes Maximiano, de 21 años, sin duda el mejor de los
fichajes 21-22, pronto hizo olvidar a su compatriota Rui Silva, revelándose
como un gran guardameta con un futuro que todo hace indicar que será brillante.
Gran parte de los puntos obtenidos por el equipo a lo largo de la liga hay que
agradecérselos a este cancerbero y sus intervenciones salvadoras, plenas de
colocación y reflejos, cuando sus compañeros de retaguardia hacían agua, tónica
de toda la temporada.
Fichajes de invierno
En el mercado de invierno hubo más
incorporaciones. La primera fue la de Álex Collado, cedido por el Barcelona. Es
un mediapunta y extremo de 23 años que llegó a debutar con el primer equipo barcelonés
en temporadas pasadas y que se reveló en los últimos partidos como un jugador
interesante, pero a su club de origen se ha vuelto.
Casi terminando el mercado de enero fichó,
por la temporada en curso más cuatro de añadido, el serbio Njegos Petrovic, de
22 años, procedente del Estrella Roja de Belgrado, al que hubo que pagar millón
y medio de euros, mediocentro que al principio fue poco utilizado, pero al
final se hizo con la titularidad y alternó buenos partidos con otros muy
deficientes.
Otra incorporación de última hora fue
la del internacional albanés Uzuni, de 26 años, extremo o mediapunta, que venía
del Ferencvaros húngaro y costó 3 millones. Firmó hasta 2026. Su fichaje obedecía
a la razón de ocupar el puesto que iba a dejar libre Machís, en esos momentos
casi cerrado su traspaso por 4,5 millones al club estadounidense Charlotte, de
la ciudad del mismo nombre en el estado de Carolina del Norte, una salida que
finalmente quedó frustrada debido a la causa que el venezolano tiene pendiente
con la justicia española. El albanés Uzuni ha resultado ser el jugador más
utilizado de los que se incorporaron en invierno.
Casi sobre la campana de final del
mercado, el Granada cerró el fichaje del joven (19 años) delantero Arezo,
uruguayo que venía del Atlético River Plate, de Montevideo. Costó 5,5 millones
el 50 % de sus derechos, y fichó por cuatro temporadas como los dos anteriores.
Se dice que el At. Madrid andaba tras sus pasos por ser un crack en ciernes, de
gran poder goleador, pero en Granada los tres técnicos de la campaña apenas
contaron con él, interviniendo en sólo 8 partidos, ninguno completo y sólo uno
como titular. No ha anotado gol alguno.
Con el mercado ya cerrado hubo una
última incorporación, la de Raba, extremo de 26 años que llegaba libre tras ser
dado de baja en el Villarreal. Fichó nada más que por lo que quedaba de
temporada. Apenas veinte minutos repartidos entre sólo dos partidos ha sido su
pobre aportación al Granada.
La austeridad que habría de presidir
el caminar rojiblanco en esta 21-22 y que proclamaron desde las altas esferas
del club parece que finalmente quedó aplazada gracias a la inyección económica
que supuso el acuerdo de LaLiga con el fondo de inversión británico CVC (2.000
y pico millones € por el 9% de los derechos audiovisuales del fútbol español
durante los próximos 50 años). Sumen y obtendrán la cantidad de 10 millones de
eurazos gastados por el Granada en el mercado invernal (más los 4,5 que hubo
que pagar por Maximiano, también salidos de los fondos CVC).
Está claro, ahora se ve, que lo que
al equipo le hubiera venido mejor en invierno era la incorporación de jugadores
con experiencia en primera, sin embargo, se optó por apuestas de futuro. Pero
no hay que olvidar que en esos momentos el Granada contaba con una mollar
distancia sobre los puestos de descenso (6 puntos sobre el 18º) que no hacía
presagiar que todo acabaría tan mal.
La Liga
El balón
echó a rodar a mediados de agosto con los aforos de los estadios todavía muy
restringidos. Tres puntos de otros tantos empates fueron los réditos
rojiblancos en la siete primeras jornadas, entre ellos la igualada obtenida en
el Camp Nou en la jornada 5, un resultado histórico porque es la primera vez
que nuestro equipo sale de ese coliseo con un punto. Un empate a uno que muy
bien pudo ser una victoria porque el gol barcelonista se produjo en el minuto
90, con lo que los rojiblancos habrían repetido la proeza del ejercicio
anterior, 1-2 en otro partido histórico. Hasta la temporada pasada, cada
comparecencia en el campo barcelonista acabó siempre con el mismo resultado,
victoria local. Van dos ejercicios seguidos en los que se ha roto esa maldición.
No sabemos cuándo tendremos oportunidad de repetir resultado positivo en el
Camp Nou.
La primera
victoria llegó ya en la jornada 8, en el Nuevo Los Cármenes frente al Sevilla,
que sólo perdió cuatro partidos en toda la liga. Para entonces el equipo se
había situado en puesto de descenso y el granadinismo había asistido a
bochornosas derrotas, como la paliza en Vallecas (4-0) o las caseras frente a Betis
y Real Sociedad, evidenciando una muy preocupante debilidad defensiva, y ya se
habían escuchado coreados por gran parte de la parroquia gritos pidiendo la
marcha de Robert Moreno.
Con todo el aforo del Nuevo Los
Cármenes por fin disponible, cosa que no ocurría desde marzo de 2020, esa
primera victoria ante el Sevilla dio paso a una racha positiva de cuatro partidos
sin perder que sirvieron para abandonar los puestos comprometidos e insuflaron
moral, en especial al ganar ampliamente en el campo del Levante, rival directo,
en un gran partido de los rojiblancos y sobre todo de Rochina; lo malo es que
el valenciano ya no volvió a exhibir sus virtudes futboleras en todo lo que
quedaba de liga.
Siguieron dos derrotas, en el campo
del Español y en casa frente al Madrid, pero inmediatamente el equipo encadenó
a partir de la jornada 15 siete partidos seguidos sin perder, otra proeza
histórica ya que de esa forma se igualó el récord que data de la 68-69, cuando
con Marcel Domingo se consiguió no salir derrotado en las siete últimas
jornadas de aquella liga. A destacar, dentro de esa serie de siete, la victoria
en el Nuevo Los Cármenes frente al At. Madrid, partido de la jornada 9 pero que
se jugó dos meses más tarde al haber sido aplazado en su día por compromisos
internacionales del campeón de la anterior liga.
Si bien el juego del equipo, salvo en
momentos puntuales, nunca entusiasmó a la afición, lo cierto es que la primera
vuelta fue buena en líneas generales y en ella el Granada conquistó 23 puntos.
Todo lo contrario de la segunda vuelta, en la que de los 15 puntos obtenidos,
nada menos que 13 cayeron en la cuenta rojiblanca después del despido de Robert
Moreno, es decir, a partir de la jornada 28, cuando sólo quedaban 11 partidos
por disputar. Desde que en la jornada 18, en la que el Mallorca salió
ampliamente goleado (4-1) del Nuevo Los Cármenes, hasta la 29, la siguiente
victoria, en el campo del Alavés, pasaron 10 jornadas sin ganar, y de los 30
puntos en juego, nuestro equipo sólo fue capaz de sumar tres del empate en Elche
y los caseros frente a Barcelona y Cádiz.
Torrecilla
En la
jornada 27, tras perder en Mestalla y estar el equipo ya a un solo punto de los
puestos de descenso, fue despedido Robert Moreno como venía pidiendo
insistentemente la hinchada partido tras partido. La dirección apostó por dar
la oportunidad al técnico del filial, Rubén Torrecilla, en principio de forma
interina, cuyo sistema favorito es el de tres centrales, y que se estrenó en el
Nuevo Los Cármenes con una derrota frente al Elche. El equipo pareció mejorar
en el aspecto anímico, pero poco más se puede decir porque al Elche le bastó
una jugada aislada para llevarse los tres puntos y los rojiblancos, aunque
dominaron y tuvieron numerosas ocasiones, fueron incapaces de batir al ex
rojiblanco Badía.
Al siguiente
partido llegó por fin la primera victoria de la segunda vuelta, y lo hizo
precisamente en casa de un rival directo, el Alavés, exhibiendo nuevamente un
espíritu muy combativo que en esta ocasión sí dio frutos y por el cual se pudo
remontar un 2-1 en contra. La siguiente jornada deparó un empate casero a dos
goles frente al Rayo Vallecano en el que otra vez los rojiblancos se vaciaron
para rescatar un punto de forma agónica e igualar el 0-2 que lucía el
electrónico al descanso. En el campo del Sevilla, en el siguiente compromiso,
empataban a dos goles los rojiblancos en el minuto 90, pero en el excesivo
alargue (10 minutos) encajaron otros dos goles y nada pudieron pescar.
Ya se ha
dicho que la principal aportación de Torrecilla pareció ser la de insuflar a
sus pupilos nuevos bríos, y gracias a eso en tres encuentros consiguió más
puntos que Moreno en los ocho partidos de la segunda vuelta que alcanzó a
dirigir. Pero todo se desmoronó en la siguiente jornada, ya la 32, en la que el
Levante, colista y rival directo, se llevó los tres puntos del Nuevo Los
Cármenes venciendo incontestablemente 1-4 en un horrible partido de nuestro
equipo en todas sus líneas, que costó el puesto a Torrecilla, destituido al día
siguiente.
Karanka
Quedando ya
sólo seis jornadas fue contratado Aitor Karanka para ocupar el banquillo
rojiblanco. Como futbolista profesional, fue defensa central en los noventa, muchas
temporadas en el Bilbao, el R. Madrid y la Selección. Lo mismo que Robert
Moreno, Karanka se estrenaba como entrenador de un equipo de la primera
división española, pero acumulaba mucha más experiencia al haber dirigido en el
fútbol inglés a equipos como Middlesbrough, al que
ascendió a la Premier, Nottingham Forest, y Birmingham, además de haber sido
segundo a las órdenes de Mourinho en el Madrid.
Karanka se estrenó con un empate sin
goles en el campo del At. Madrid, una plaza en la que no puntuaba nuestro
equipo desde la 74-75. El nuevo técnico se esmeró en corregir el principal
talón de Aquiles del equipo toda la temporada, la fragilidad defensiva, y lo
consiguió a base de orden y volviendo al clásico esquema de 4-2-3-1, procurando
juntar las líneas. A pesar del resultado, nuestro equipo cayó al puesto 18º, el
primero de los de pérdida de categoría, que no ocupaba desde la jornada 7.
El punto arrancado en el Wanda tuvo
la contrapartida de dejar en cuadro la defensa para el siguiente choque, y así,
frente al Celta en Los Cármenes, ya jornada 34, hubo que colocar a Puertas en
el lateral derecho e incluir a Barcia, del filial, como central izquierdo, ante
las bajas de los tarjeteados Víctor Díaz y Domingos Duarte. No funcionó el
experimento del canterano, superado por un Iago Aspas que, como casi siempre
que se enfrenta a los rojiblancos, volvió a sobresalir en su equipo y estrujar
aquella vieja cuenta pendiente desde el play off de 2011. El partido acabó en
empate gracias a un gol de Machís en el descuento que sirvió para por lo menos
anotar un punto.
El momento estelar del técnico vasco
llegó a la siguiente jornada, con una victoria apabullante de nuestro equipo,
nada menos que 2-6, un resultado histórico en el campo de un rival directo por
huir de la quema, el Mallorca, que desarrollamos más ampliamente en la sección
“Un Partido para el Recuerdo”.
Una nueva victoria a la jornada
siguiente, 1-0 frente al Bilbao en Granada, dejó la permanencia muy al alcance
de la mano a falta de dos jornadas. A nuestro equipo le valía ganar cualquiera
de los dos partidos que faltaban e incluso hubiera servido también empatar
ambos y hasta perderlos, según lo que obtuvieran los rivales, gracias a tener
el golaveraje ganado al Alavés y al Mallorca y empatado con el Cádiz y el
Levante. Una derrota en el Villamarín en la 37 aplazó el desenlace hasta la
última jornada, con visita al Nuevo Los Cármenes del Español, que nada se
jugaba.
Penal a las
nubes y adiós muy buenas
En la jornada 38, de las varias
combinaciones que podían darse, al Granada sólo le eran desfavorables una o
dos. ¿Y qué ocurrió?, pues eso, que salió la mala y a segunda. Como en otros
momentos históricos acabados en desastre después de haber cundido el optimismo
por tener todo a favor, el 22 de mayo de 2022 viene a sumarse a la lista de
frustraciones rojiblancas en el último suspiro. Algo parecido a lo que ocurrió
el famoso 25-J, vulgo “murcianazo”. Como aquel infausto día del año 2000,
amaneció en Granada con un cielo plomizo y una atmósfera calimosa y de mucho
calor a pesar de estar todavía en mayo, aunque a la hora del partido se abrió
el cielo. Y lo mismo que aquella tarde de mal recuerdo, el Granada en un pésimo
partido no fue capaz de marcar un solo gol, en esta ocasión ni de penalti, fallado
por Jorge Molina para aumentar la cruel herida, mientras que los rivales
directos ganaron sus respectivos compromisos. El 0-0 final fue insuficiente y cuando
ya se paladeaba la permanencia después de una insufrible temporada, por un solo
punto nos fuimos a segunda.
La mejora del equipo experimentada bajo la dirección de Karanka, que sólo
perdió un partido de seis, no bastó. Quizá si se hubiera recurrido antes al
técnico vasco estaríamos hablando de otro resultado menos frustrante. En
cualquier caso, su labor al frente de la plantilla rojiblanca ha sido bastante
positiva y ha renovado como entrenador del Granada para la próxima temporada,
aunque no haya podido evitar el descenso.
Otra
revolución administrativa y deportiva
El nefasto ejercicio rojiblanco 2021-22 se cierra con el cese de la
directora general, Patricia Rodríguez, así como del responsable de la parcela
deportiva, Pep Boada. No vamos a cuestionar aquí las capacidades de unos y
otros, pero en fútbol los resultados mandan y como esos resultados han sido de
fracaso sin paliativos, la consecuencia lógica es la salida de los
responsables.
El último día de mayo de 2022, Patricia Rodríguez era despedida de su cargo
de directora general por el consejo de administración, cese comunicado por el
abogado de la entidad Javier Aranguren. Avalada por su labor previa en la misma
parcela en clubes como Éibar y Elche, fue contratada en febrero de 2021 y vino
a Granada para cuadrar a la baja todas las cuentas que, según la nueva
dirección del club, los anteriores habían desmadrado. No ha podido en Granada
repetir los éxitos que sí ha obtenido en otras latitudes.
Una semana antes y por el mismo conducto ya se le había entregado el
finiquito al director deportivo Pep Boada más todo su amplio equipo de
colaboradores. La
primera contratación que cerró el Granada cara a la 21-22 fue la de su director
deportivo, una vez despedido Fran Sánchez. Entre una larga lista de posibles,
se optó por fichar al gerundense Pep Boada, ex futbolista profesional de
Figueras, Palamós y Gerona, pero sin experiencia en ese cargo pues su labor
hasta el momento fue la de ojeador del FC Barcelona.
Para sustituir a Patricia Rodríguez,
poco después se cerró la incorporación de Alfredo García Amado, que ya fue
director general muchos años del Sporting de Gijón y posteriormente del
Córdoba. Éste contrató al director deportivo para reemplazar a Boada: Nico
Rodríguez, también muchos años director deportivo de distintos equipos como
Alcorcón, Las Palmas, Elche, Getafe y Gijón. Frente a los reemplazados, se
trata de profesionales de amplia experiencia en sus respectivas parcelas. Una
de sus primeras decisiones ha sido la de no renovar a dos jugadores muy
importantes en las últimas cinco temporadas: Germán y Montoro.
Relevo en la presidencia
A primeros
de junio, en la comparecencia ante los medios de la consejera Sophia Yang, la
primera y única desde que volvió al Granada, en la que asumió toda la
responsabilidad por el descenso y que sirvió además de presentación del nuevo
director general y del nuevo director deportivo, se comunicó a la prensa que el
desconocido (por estos pagos) presidente del GCF, Rentao Yi, ya no es a su vez
presidente de DDMC, y que nunca fue el propietario pues no se trata de una
corporación personal. Como última noticia de esta temporada, finalizando junio,
Juan-Sophia Yang pasa a convertirse en nueva presidenta del GCF, la primera
mujer en toda la historia que ocupa ese cargo en nuestro club.
La Copa
En Copa del Rey tampoco asistimos a
una temporada rojiblanca siquiera pasable. Sólo dos eliminatorias, dos partidos,
disputó nuestro equipo.
El primero supuso un resultado histórico, victoria rojiblanca 0-7. Y es
histórico porque ha sido la primera vez en sus noventa y un años que el Granada
termina un partido oficial con ese guarismo en su tanteador jugando como
visitante. Un resultado que es a su vez el segundo más amplio a domicilio de
los 91 años de existencia del GCF, sólo superado por el 0-8 en Melilla ante el
Rusadir de los años de militancia en Tercera. Fue en el Heliodoro Rodríguez
López, de Tenerife, pero el rival era el muy modesto CD La Laguna, de Regional
Preferente canaria o sexta división, formado por jugadores muy jóvenes y por
completo aficionados. Un once “B”, con algunos elementos del filial, no tuvo
problema alguno para golear a los tinerfeños. El canterano de Monachil Adri
Butzke anotó tres de los goles rojiblancos.
Superado ese primer rival, tocó enfrentarse en la siguiente ronda al Mancha
Real, de la 2ª RFEF, la cuarta categoría, del mismo grupo que el filial
Recreativo. Sobre el césped artificial del minúsculo campo del pueblo jienense,
a pesar de recurrir a lo largo del partido a varios titulares, el Granada salió
derrotado 1-0 y eliminado del torneo del KO, escribiendo una de las más
nefastas páginas de su historia. Tan dolorosa derrota y eliminación no tuvo
mayores consecuencias porque en esos momentos, mediados de diciembre, el
Granada atravesaba su mejor racha en la liga y estaba bien clasificado.
Filiales
El Recreativo militó en el grupo V
de la nueva categoría 2ª RFEF (cuarta), que por primera vez echó a andar en la
temporada 21-22. Estuvo dirigido por Rubén Torrecilla (con Diego Máinz de
segundo) hasta la jornada 24 (de 34). Lo mismo que el equipo de los mayores,
fue mucho mejor su primera vuelta que la segunda, y se dio el fenómeno de que en
esa primera vuelta obtuvo muchos más puntos jugando a domicilio que como local
en la Ciudad Deportiva. En la primera mitad de la liga se movió casi siempre en
los puestos altos, aunque sólo ganó un encuentro como local (por cuatro como
visitante) y no perdió ninguno lejos de Granada (hasta la jornada 19 no fue
derrotado jugando como visitante). En la segunda vuelta se mantuvo casi toda
ella en la mitad de la tabla, pero sin demasiado desahogo dado que los seis
últimos (de 18) podrían descender.
Jugada la jornada 24, Torrecilla se hizo cargo del primer equipo al ser
cesado Robert Moreno, y el filial pasó a estar dirigido por el dúo Roberto
Cuerva-Julio Algar durante las dos jornadas siguientes, hasta que en la 27 Juan
Antonio Milla, que venía entrenando al juvenil A, se puso al frente del
banquillo recreativista, consiguiendo acabar la liga en el puesto 8º, a salvo
de contingencias.
Hasta ocho jugadores de la plantilla del primer filial jugaron con el
primer equipo o entraron en alguna convocatoria: Ángel, Barcia, Brau, Bryan
Zaragoza, Butzke, Pepe, Sarr y Torrente.
Por su parte, el Granada juvenil, del grupo IV de División de Honor, en una
sensacional temporada acabó segundo, sólo superado por el Betis, en una liga en
la que conquistó 107 puntos (34 victorias, 5 empates y 3 derrotas en 42
jornadas; 110 goles a favor por sólo 28 en contra). Sin embargo, no pudieron los
juveniles redondear su brillante papel con la clasificación para la Copa de
Campeones, que juegan los primeros de cada uno de los siete grupos nacionales
más el mejor segundo clasificado, condición que perdió porque en el último
partido de su liga, en Tomares (Sevilla), el mismo día en que el Granada
descendía a segunda, 22 de mayo de 2022, fueron a cosechar una derrota en un
partido que ganaban al descanso y ante un rival que con esa victoria evitó el
descenso.
Juan Antonio Milla fue el entrenador del juvenil A hasta pasar a dirigir al
Recreativo, momento en que fue sustituido por Rafa Pérez. De la mano del
primero se consiguió la segunda participación en Copa del Rey, en la que
eliminó en XVI al Leganés y después al Damm barcelonés (a domicilio) en VIII,
para caer en IV ante el Celta en Balaídos. Ese brillante papel del primer
juvenil hace albergar esperanzas de futuro pues hasta con internacionales
cuenta en sus filas, como el malagueño Mario González y como Joshua Farrell,
aunque éste con la selección de Gales.
El Granada CF femenino, entrenado por el leridano Roger Lamesa, en esta
ocasión acabó su liga del grupo Sur de Segunda División en tercer lugar,
superado por el Alhama de Murcia, que ascendió, y por el Cacereño. Para el
ejercicio venidero se anuncia una reestructuración profunda del fútbol femenino
y la segunda categoría pasará a llamarse 1ª RFEF y estará formada por un único
grupo de 16 equipos, mientras que la hasta ahora llamada liga Iberdrola, la
primera categoría, pasa a ser profesional y queda fuera del ámbito de la
Federación que preside Rubiales. El Granada CF al terminar tercero ha
conseguido entrar en ese único grupo de la segunda categoría.
LA PEQUEÑA HISTORIA DE LA TEMPORADA 2021-2022
El Once de Nuestras Vidas: Tres nuevos libros sobre historia del Granada CF se
han publicado esta temporada. El primero, a iniciativa de la Asociación
Española de la Prensa Deportiva en Granada y conmemorando el 90 aniversario,
lleva por título El Once de Nuestras Vidas (Noventa Apasionantes Años del
Granada CF), publicado en diciembre de 2021. Se trata de un volumen de buen
tamaño en el que, con la colaboración de los historiadores oficiales del club y
de distintos periodistas locales, se incluye una semblanza de todos y cada uno de
los futbolistas y entrenadores (seis por puesto) que pasaron por nuestro equipo
y que son recordados por lo mucho y bueno que aportaron. Entre todos ellos se
ha seleccionado al que se supone que es el mejor equipo que podría formarse: el
once de nuestras vidas. Además, el libro se completa con variados artículos
sobre distintas temáticas relacionadas con la historia de nuestro club.
El Once de Nuestras Vidas es un equipo que estaría
hipotéticamente formado por futbolistas de todas las épocas históricas que en
cada puesto fueron los mejores mientras vistieron de rojiblanco, y ese once
excelente sería el que forman: Izcoa; De la Cruz, Aguirre Suárez, Fernández,
Siqueira; Lasa, Castellanos, Yangel Herrera, Vicente; Porta y Soldado. Los
historiadores oficiales seleccionamos previamente seis jugadores por puesto,
pero la decisión última de quiénes serían los once teóricamente mejores quedó en
manos de todo aquel que quisiera participar a través de Internet mediante
votación, así que esos once que salieron finalmente son los que alcanzaron el
mayor número de votos en un sufragio que estuvo abierto a todo el mundo. Como
míster indiscutible de este presunto mejor equipo de la historia, el elegido
mayoritariamente por los participantes fue Diego Martínez.
No obstante y teniendo siempre presente que el dictamen del pueblo soberano es inapelable, a nosotros se nos ocurre la objeción de que ese presunto mejor once no abarca toda la historia del club de nuestros amores, sino que más bien es una selección del Granada de los 70, completada con tres únicos representantes de la época más reciente. Faltan algunos excelentes peloteros de los cuarenta y de los cincuenta. También echamos de menos la presencia de algún granadino en ese once. El olvido más sangrante -a nuestro juicio- es el de Millán, el primero de los únicos tres internacionales rojiblancos y el mejor producto de nuestra cantera según todos los tratados de historia del Granada CF. Algunos más del primer Granada en división de honor, el de los 40, así como de los que alcanzaron la final de copa en 1959, muy bien podrían haber formado en ese supuesto once de nuestras vidas forofas, siempre a nuestro juicio, claro.
El Granada de Diego: También en diciembre salió otro libro de historia del
Granada CF, éste referido a las tres temporadas anteriores a la que nos ocupa,
es decir las que van de 2018 a 2021: los tres ejercicios de Diego Martínez al
frente del Granada CF. Se titula “El Granada de Diego” y su autor es el
periodista granadino Javier Aguilera. El volumen parte de los primeros pasos de
Diego Martínez en la labor de preparador, cuando, muy joven, era estudiante en
la facultad de Ciencias del Deporte de Granada y hacía sus primeros pinitos
como entrenador de niños y adolescentes en Albolote. De ahí hasta convertirse
en el entrenador cotizado que es en la actualidad, pasando por el ascenso de
2019 y la brillante participación de nuestro Granada en Europa League.
90 años 90 historias: El tercer nuevo libro sobre historia del Granada CF, promovido
por el propio GCF y dentro de los actos de conmemoración del 90 aniversario de
la entidad y como remate a los mismos, apareció el 6 de abril de 2022 bajo el
título “90 años, 90 historias”. Con la participación desinteresada de más de
treinta firmas, entre ellas los historiadores oficiales del club, se trata de
un volumen grande (en tamaño y peso), tipo enciclopedia, donde se recogen
numerosas entrevistas llevadas a cabo por José Luis Entrala en los años ochenta
a personajes claves en la historia del club, además de otras vivencias
personales y anécdotas relatadas por profesionales de la información deportiva
o por personas sin más vinculación que su amor a los colores rojiblancos. Es
una buena dosis de sentimiento y recuerdo con un toque de historia, dijeron
desde el propio Granada CF.
Gerardo Morales a la calle: Una vez terminada la temporada, el alma máter de
este último libro, el periodista Gerardo Morales, que venía desde hace cuatro
años desempeñando en el GCF las labores de jefe del área social, ha sido
despedido. Gran conocedor de la historia de nuestro club, era además uno de los
pocos granadinos en la entidad. Él se encargó de coordinar todos los ingentes
trabajos que desembocaron en 90 años, 90 historias, además de ocuparse
de otras labores relacionadas con la grada de animación y más funciones menudas
en el día a día. ¿Otra víctima de la austeridad que debe reinar en el club
según sus dirigentes? Seguramente, pero no creemos que sus emolumentos se
parecieran ni de muy lejos a los de alguno de los tuercebotas o machacalápices
que nos han conducido a segunda.
Volvió el público a las gradas: La maldita pandemia de covid 19
sigue todavía en España infectando indiscriminadamente a diestro y siniestro,
pero su morbilidad es mucho menor gracias a que prácticamente toda la población
está ya vacunada. Así, al echar a andar la temporada 21-22 pudo volver el
público a dar colorido y animación a los partidos de fútbol, al principio
todavía de forma restringida, todos con mascarilla y con prohibición de comer o
beber, excepto agua, manteniendo siempre la separación entre los asientos. A lo
largo de la temporada y en vista de que la pandemia iba cediendo terreno se
fueron dejando paulatinamente sin efecto estas prohibiciones para terminar con
todos los estadios españoles a pleno aforo. En Granada empezamos con solamente
un 25 % del aforo del Nuevo Los Cármenes permitido, con sorteo entre los
abonados previamente inscritos para poder acceder al campo y estrictas medidas
de seguridad que sufrieron estoicamente los hambrientos de balompié hinchas
rojiblancos, traducidas en colas de hasta tres cuartos de hora de espera. Pero,
como en el resto de campos españoles, pronto, en octubre, se permitió ocupar
todas las localidades. Inevitable parece traer aquí el lamento de gran parte de
la parroquia granadinista: Lo mejor de la historia de nuestro equipo hemos
tenido que verla por TV, y para cuando nos han dejado acudir al campo van y nos
obsequian con una horrible temporada y un descenso; ¡perra vida la del forofo
de un modesto! Altas cotas en el fonsecámetro alcanza la cosa, sí
señor.
Coletazos de Hope: Aquella empresa que creó el que creíamos propietario del GCF
SAD, John Jiang, dedicada a la gestión o management de los clubes de fútbol
profesionales en su órbita, entre ellos el Granada CF, y que respondía al
nombre de Hope Football Group, se extinguió hace ya algún tiempo dejando una
considerable losa de impagos a sus empleados. Como sabemos, John Jiang anda
refugiado en su China natal desde hace al menos dos años para esquivar a sus
muchos acreedores, entre ellos la Hacienda española, así que los ex
trabajadores de Hope emprendieron acciones legales contra el Granada como
presunto responsable subsidiario. Desde el club se niega cualquier tipo de
responsabilidad en esos impagos, que son cosa exclusiva del fugitivo Jiang.
El Granada el 21 de la Clasificación Histórica: En diciembre el Granada CF subió un
peldaño en la que se conoce como clasificación histórica del fútbol español y
se colocó en el 21, adelantando al Málaga CF. Para los que suscriben, dicha
clasificación histórica no es precisamente eso, es decir, histórica, o no lo es
tanto como debiera ya que el único criterio que rige para la posición de los
clubes en la tabla es el de los puntos efectivos conseguidos sobre el terreno
de juego, sin tener en cuenta que las victorias hasta 1995 valían sólo dos
puntos y a partir de ahí empezaron a valer tres. Así se explica que clubes con
bastantes menos temporadas en máxima categoría que el nuestro y que sólo en las
últimas décadas juegan o han jugado en 1ª aparezcan por delante o estén
pisándonos los talones, como el Getafe, el 22 de la clasificación, o como el
mismo Málaga CF recién superado (ahora el 23º), ambos con sólo 17 temporadas en
máxima categoría, nueve menos que el GCF.
Patrocinador: En toda la primera vuelta 21-22, sobre el pecho de los
futbolistas del GCF no lució publicidad de ningún tipo. Fue a partir del primer
partido de la segunda vuelta, con visita del Barcelona, cuando sobre las rayas
rojiblancas horizontales de las camisetas del primer equipo, también de las del
Recreativo y las del femenino, apareció la leyenda “Platzi”, una plataforma de
educación tecnológica online (programación, marketing digital, economía,
diseño…) con sede en Sillicon Valley, USA.
Rachas: La mejor serie de partidos sin perder de nuestro equipo en máxima
categoría data de la temporada 68-69, cuando el Granada de Marcel Domingo
consiguió no perder un solo partido de los últimos siete de aquella liga (3
victorias y 4 empates), prolongada con las dos primeras jornadas de la
temporada siguiente, la 69-70 (una victoria y un empate). A pesar de lo nefasta
que ha sido la 21-22, esa racha de siete sin perder ha conseguido igualarla,
permaneciendo sin ser derrotado entre las jornadas 15 y 20, jugando en ese
intervalo el partido de la jornada 9 frente al At. Madrid en el Nuevo Los
Cármenes, aplazado en su día. Lo mismo que en 1969, fueron tres victorias
(Alavés, Mallorca y At. Madrid, las tres caseras) y cuatro empates (Bilbao,
Cádiz y Elche a domicilio, y Barcelona en Granada). Era el Granada de Robert
Moreno que terminaba la primera vuelta con una cómoda ventaja sobre los puestos
de descenso que no hacía presagiar lo mal que acabaría la temporada.
Precisamente, a esa racha de siete sin perder le siguió otra racha, ahora de
signo totalmente negativo: ocho encuentros seguidos sin ganar y en los que los
rojiblancos sólo fueron capaces de anotar un punto de un empate casero sin
goles frente al Cádiz.
Torrente internacional sub 21: El joven defensa Torrente, murciano
de nacimiento, pero salido del Recreativo y debutante esta temporada en máxima
categoría, se hizo con la titularidad en el perfil izquierdo del centro de la
defensa rojiblanca en detrimento del internacional peruano Abram, jugando un
total de 20 partidos entre liga y copa hasta que una lesión de larga duración
lo apartó del once titular. En ese periodo alcanzó la internacionalidad sub 21
el 25 de marzo ante la selección de Lituania. Jugó los últimos 20 minutos de
ese partido, que ganó España 8-0, valedero para la Eurocopa sub 21.
Tour interactivo: En abril el Granada CF puso en marcha el que es el primer
tour interactivo del fútbol español. Al precio de 10 euros (8 para abonados),
quien quiera puede, los viernes tarde y los sábados por la mañana, darse un
garbeo virtual por la historia del club a través de códigos QR, dispositivos
móviles y gafas especiales, y visitar en su amplitud el Nuevo Los Cármenes.
Machís ausente: Muchos jugadores básicos en la obtención de los éxitos recientes
abandonaron el club antes de empezar esta triste temporada sin que los que tomaron
el relevo pudieran comparárseles, de ahí el mal resultado final. A eso hay que
sumar que otros también básicos no se marcharon, pero en la práctica es como si
lo hubieran hecho porque estuvieron muy por debajo de lo que habían ofrecido en
campañas anteriores y de ellos cabía esperar. Machís es el más doloroso ejemplo
de estos presentes-ausentes. En estas mismas líneas, pero referidas a
cuatro años atrás, hablábamos de “machisdependencia” de aquel Granada de la
17-18 recién descendido en la que fue la primera gran temporada del venezolano
vistiendo de rojiblanco. Después se marchó al Udinese de Pozzo para volver con
el equipo de nuevo en primera en 2019. Las dos temporadas siguientes fueron las
de su consagración, marcando golazos desde su posición de diestro escorado a la
izquierda que se abre hacia su lado bueno para sorprender a los guardametas
contrarios, como aquel enorme e inolvidable gol que le marcó al PSV en
Eindhoven.
Problemas extradeportivos que afectan
a su vida privada parece ser que son los culpables del bajón en su rendimiento
en la temporada 21-22. Entre ellos un mal encuentro que tuvo el futbolista en
abril de 2021 en un bar de Churriana, en el que se vio envuelto en una trifulca
por la cual la fiscalía le pide 18 meses de prisión por dos delitos de lesiones,
en una causa que aún está pendiente de vista y sentencia.
El venezolano no estaba ya a gusto en
nuestra tierra por esa y otras razones y pidió salir antes de empezar la 21-22.
El América mejicano presentó una oferta por Machís que fue desestimada por
escasa. Ya en febrero estuvo casi hecho su traspaso al fútbol USA, la MLS, al
Charlotte de Carolina del Norte, que ofreció algo más de 5 millones de euros,
pero a última hora y cuando existía acuerdo entre los dos clubes, el problema
judicial de Machís abortó la operación. Por fin, al terminar la 21-22, en
junio, es ya definitiva su salida de nuestro equipo camino de México. Su
destino es el FC Juárez, de la fronteriza Ciudad Juárez, en el estado de
Chihuahua, de primera, que paga 3,5 millones de los que al Granada le
corresponden 3 y el resto es para el Udinese porque así se acordó en el momento
de su fichaje en 2019.
Termina así una relación con el Granada
y la ciudad de 10 años, desde que en 2012 y con apenas 19 se incorporó al
filial. La última temporada de Machís ha sido para olvidar, pero lo que para
siempre quedará en el recuerdo del hincha rojiblanco es sus grandes galopadas y
desbordes por la izquierda, sus centros medidos y sus golazos por la escuadra
que valieron no pocos puntos. Siete temporadas, 156 partidos y 34 goles es su
hoja de servicios a la causa rojiblanca.
Diego Martínez, parado de lujo: El entrenador de los éxitos
rojiblancos, Diego Martínez, no quiso continuar un cuarto ejercicio al frente
del Granada. Las razones exactas de la negativa no las sabemos, pero es fácil
intuir que la austeridad que pregonaron los nuevos responsables del club,
traducida en la no continuidad de piezas fundamentales en el equipo, fue la que
le decidió a dar ese paso. Tras unos meses en Inglaterra, empapándose de
aquellos sistemas y planteamientos y aprendiendo el idioma, volvió a Granada,
donde tenía su residencia. A lo largo de la 21-22 rechazó sistemáticamente las
ofertas de distintos clubes en apuros para sustituir a los técnicos que habían
comenzado la temporada: Levante, Elche y alguno más, seguramente en espera de
una oferta más atractiva, pero el resultado fue que la temporada recién
terminada ha supuesto para el vigués un año sabático en el que no ha ocupado
ningún banquillo. Para la 22-23 sí que va a tener empleo, el Español acaba de
contratarlo. Éxitos le deseamos desde aquí.
Dani Benítez volvió a Granada: El recordado Dani Benítez, después
de su salida del Granada en 2014 y tras un largo periplo por Alcorcón, Ferrol,
Poblense y últimamente Andorra, a sus 34 años volvió a Granada, donde tiene
familia y donde mejor le fue en toda su carrera futbolística. El Arenas de
Armilla, de División de Honor Andaluza, la sexta categoría, lo enroló en sus
filas en enero. Su buen hacer ha resultado fundamental para la exitosa campaña
del club armillero, culminada con la vuelta a Tercera, marcando Benítez en el
último partido los dos goles que dieron la victoria y el ascenso.
DDMC en horas bajas: El holding chino accionista mayoritario del GCF, Wuhan DDMC
Football Club Management, está de franca capa caída. A finales de mayo se hizo
público que la corporación china ha visto cómo el valor de sus acciones se ha
depreciado en un 68 % a lo largo del año en curso, además, la empresa también
integrada en DDMC, de la que Yu Lingxiao es director ejecutivo, el otro
consejero del Granada junto a Sophia Yang, Super Sports Media es su
nombre, adjudicataria de los derechos televisivos del fútbol español en China
hasta 2025, ha incumplido sus compromisos y ha dejado de ingresar unos 45
millones de euros a LaLiga, que le reclama una indemnización de 105 millones.
Encima, el club Chongqing
Liangjiang Athletic, buque insignia futbolero del
holding chino, aquél que en su día compró a Adrián Ramos para después cederlo
al Granada, ha tenido que retirarse de la competición antes de que ésta echara
a andar por deudas que rondan los cien millones, y ha desaparecido del panorama
deportivo del país oriental. La maldita pandemia de covid 19, de especial
virulencia en China y que afecta sobre todo a las actividades de ocio, parece
ser la culpable del desastre. Como hinchas del GCF, sólo nos cabe desear que
tanta noticia ruinosa que viene de oriente no acabe afectando negativamente al
club de nuestros amores.
Tirando de fonsecámetro: A propósito del descenso, no deja de ser curioso,
pero en el peor sentido de la palabra, que de las diez pérdidas de categoría
que registra la historia de nuestro club, cuatro (1967, 1985, 1988, 2022) se
han producido como local, mientras que de los 13 ascensos sólo dos (1934 y
2006) se han celebrado jugando el partido decisivo en Granada. Incluso otro
descenso, que finalmente quedó anulado y por eso no cuenta, el de 1952, también
llegó tras un partido en Los Cármenes. Será por aquello de lo que dicen que
abunda en Graná y, según Ladrón de Guevara, tiene su km 0 en el granadillo de
Puerta Real. ¡Vamos, digo yo!
Obituario
La primera defunción de un ex granadinista ocurrió en el mes
de agosto, Quiles, Salvador Escrihuela, murió en su tierra valenciana a los 70
años. 7 temporadas en dos etapas distintas, 221 partidos y 41 goles de
rojiblanco fueron sus servicios al GCF, además de una buena cantidad económica
por su traspaso al Alavés en 1977.
En septiembre murió en Sevilla a los 79 años Juan Corbacho,
que fue entrenador del Granada 26 partidos de la temporada 1991-92, en 2ª B,
hasta ser relevado por Pepe Parejo.
El sevillano Antonio Flores Pedraza, “Margarito” Flores,
extremo izquierdo del Granada entre 1965 y 1970, 96 partidos y 16 goles (dos
ascensos a 1ª), murió en septiembre, a los 77 de edad, en Granada, donde se
había afincado desde su retirada.
Especialmente sentida pérdida para quienes suscribimos fue la
de Antonio Lasso Rebate en diciembre, a los 87 años. Amigo y colega en las
labores de contar la historia de nuestro Granada CF, fue autor de varios libros
de historia rojiblanca, y en distintas etapas ejerció como secretario y
delegado del club, además de haber sido delegado de la Federación Andaluza de
Fútbol en Granada y antes de eso presidente de su Comité de Competición. Pero,
sobre todo, fue un hombre bueno, cercano, generoso y muy querido.
A los 52 años, también en diciembre, murió en Nápoles de un
paro cardíaco el menor de la saga Maradona, Hugo Hernán, “el turco”. No
perteneció nunca a nuestro Granada, pero lo mismo que su hermano mayor, Diego
Armando, tiene un importante papel en la historia rojiblanca desde aquel 15 de
noviembre de 1987, en el famoso partido amistoso de los Maradona en Los
Cármenes frente al Malmoe sueco. Al igual que su otro hermano, Lalo, se quedó
muy lejos de emular al gran Diego.
Jaco, Jacob Azafrani Beliti, defensa lateral y extremo
hispano-marroquí nacido en Larache durante el protectorado español sobre el
norte de Marruecos, jugó en el Granada de la 57-58 un total de 13 partidos.
Murió en enero en Ceuta a los 89 años.
También en enero de 2022 nos dejaba Gento, el mítico 11
Francisco Gento López de las seis primeras copas de Europa merengues. Su
vinculación con el Granada reside en que, sin mucha fortuna que digamos, fue su
entrenador en 18 partidos de liga y cinco de copa de la temporada 1980-81.
Murió en Madrid y contaba 88 años.
Otro más para sumar a la lista de fallecidos durante el curso
de esta temporada es un jugador que pasó fugazmente por nuestro equipo, Antonio
Oviedo Saldaña, conocido para el fútbol por su primer apellido, que falleció en
mayo en Mallorca a los 83 años. Con la temporada 66-67 avanzada fue fichado por
el Granada, pero no llegó a disputar ni un solo minuto con la camisola
rojiblanca, ni siquiera en un amistoso. Médicos al servicio del Granada
dictaminaron en el momento de su fichaje que una antigua lesión le impedía
rendir en condiciones óptimas, razón por la cual el club intentó romper el
compromiso, pero el caso llegó a los tribunales, que fallaron a favor del
futbolista y el Granada se vio obligado a indemnizarlo. A la temporada
siguiente, ya en segunda, por fin se le pudo ver jugar en Los Cármenes, pero
fue con otra camiseta, la del Levante.
UN PARTIDO PARA EL
RECUERDO
Mallorca 2 Granada 6
Sábado 5 de mayo de 2022, 14 horas
Partido correspondiente a la jornada 35 de la liga de Primera
División 2021-22
Estadio Son Moix, de Palma de Mallorca, 18.486 espectadores,
con presencia de unos 500 granadinistas
Árbitro: Ricardo de Burgos Bengoetxea. Amonestó a los locales Raíllo, Maffeo y Valjent; y a los visitantes Domingos Duarte y Petrovic
Entrenador: Aitor Karanka
Presidente: Rentao Yi
Alineación del Mallorca
Sergio Rico; Maffeo, Valjent, Raíllo, Jaume Costa (Oliván
84’); Kubo (Llabrés 84’), Baba, Salva Sevilla (Antonio Sánchez 68’), Dani
Rodríguez (Ángel 68’); Abdón Prats (Lee 53’) y Muriqi
Alineación del Granada
Maximiano; Quini, Víctor Díaz, Domingos Duarte, Escudero (Arias
77’); Petrovic, Milla; Antonio Puertas (Germán 77’), Collado (Gonalons 62’),
Machís (Uzuni 62’); y Luis Suárez (Jorge Molina 51’)
Los goles
0-1, m. 6: Luis Suárez desde cerca tras varios rechaces en un
córner botado por Collado
1-1, m. 28: Salva Sevilla de gran disparo desde fuera del
área muy ajustado al palo
1-2, m. 47: Escudero tras pared con Antonio Puertas
1-3, m. 55: Antonio Puertas de sutil desvío de tacón desde
muy cerca, a servicio por la izquierda de Jorge Molina
2-3, m. 58: Raíllo de cabeza en un balón colgado, superando
la defensa granadinista
2-4, m. 68: Jorge Molina de disparo lejano muy colocado que
sorprende al meta local
2-5, m. 78: Uzuni a trompicones desde cerca, a servicio de
Jorge Molina
2-6, m. 90: Jorge Molina de disparo cruzado que toca el poste
y entra
Era el
tercer partido de Aitor Karanka al frente del equipo, saldados los dos
anteriores con sendos empates, en el campo del At. Madrid y en casa frente al
Celta, y el Granada marchaba en la tabla el 18º, es decir, en puesto de
descenso, a un punto de la salvación que marcaban el rival de esa tarde, el
Mallorca, y también el Cádiz, cuando sólo faltaban por jugarse cuatro partidos.
Era por tanto vital la victoria para albergar un rayo de esperanza. Una derrota
habría supuesto un paso atrás que implicaría tener que estar a expensas de que
fallaran esos rivales directos.
En el
anterior partido, frente al Celta, debido a la acumulación de amonestaciones de
Víctor Díaz y Domingos Duarte, Karanka se había visto obligado a presentar una
defensa improvisada, con Antonio Puertas en el lateral derecho y el recreativista
Barcia como central izquierdo, al que esa “bestia antigranadinista” que se
llama Iago Aspas trajo por la calle de la amargura durante los 76 minutos que
jugó. Pero para viajar a Baleares recuperaba a los dos tarjeteados y de esa
manera podía alinear al mismo once que salió de inicio en el partido del debut
del nuevo técnico, arrancando un punto del Wanda-Metropolitano.
Con el campo
de Son Moix abarrotado porque el partido era de más de tres puntos para los dos
contendientes y con un Granada vestido entero de blanco, que por primera y
única vez en toda la liga repetía una alineación, a la hora del almuerzo se
iniciaba este partido en esa plaza isleña de gran importancia en la historia
nonagenaria del club. En Mallorca el Granada ha conseguido dos ascensos a
primera (1968 y 2019) y además las dos únicas veces que nuestro equipo ha sido
capaz de hacer seis goles lejos de Granada, jugando en máxima categoría, han
tenido como escenario esta isla, donde ya el Granada de Pipo Rossi en la 69-70
consiguió una victoria a la antigua: 4-6. Sólo hay un precedente más de seis
goles a favor en campo ajeno, y es la victoria del Granada de Diego Martínez en
Navalcarnero de la temporada anterior, la 20-21, 0-6 en VIII de Copa del Rey.
Aparte y superando esos guarismos, tenemos el que sigue siendo récord absoluto de
victoria a domicilio, el 0-8 en Melilla al Rusadir de los años oscuros de
cuarta categoría, en la 20004-05; y el segundo en ese ranking, que es el 0-7 en
Tenerife frente al La Laguna en la primera ronda de copa de esta misma temporada.
Ya se ve que
el amplio marcador final empezó a moverse muy pronto, y lo hizo a favor de los
nuestros, pero previamente, casi en la primera jugada del partido, ese gran
descubrimiento, lo mejor de la temporada rojiblanca, el portero portugués
Maximiano, empezó a ganar el encuentro salvando un mano a mano con el japonés
Kubo, que se había zafado de la defensa blanca y se había plantado solo ante el
luso, quien con una oportunísima salida le cerró el espacio.
Con resultado de empate a uno acabó
la primera parte, en la que se puede decir que los locales fueron algo mejores.
Pero fue empezar la segunda mitad y Escudero, otro de los pocos fichajes de
esta temporada que se salva, en una buena combinación con Petrovic y Puertas
volvió a adelantar al Granada. El 1-3 de Puertas poco después parecía dejar la
cosa sentenciada, aunque enseguida acortaron el marcador los isleños. Pero el
Granada supo sacar réditos de las pérdidas de balones en la parcela ancha de
los de casa y de la falta de contundencia de su defensa hasta concluir con ese
inusual marcador de 2-6 que supone un hito histórico al ser la victoria más
amplia del Granada en campo extraño de sus 26 temporadas en primera.
El gran triunfador fue Jorge Molina,
autor de dos goles y de dos asistencias. A sus cuarenta años, ya cumplidos, es
el futbolista de más edad que ha vestido de rojiblanco en máxima categoría. Un
veteranísimo, pero más que rentable para nuestro equipo, que en sus dos
primeras campañas de rojiblanco ha conseguido un total de 27 goles. Se le da
bien a Molina el equipo balear, al que hizo un hat-trick en el partido de la
primera vuelta en el Nuevo Los Cármenes, que ganó 4-1 nuestro equipo. El
cronista del diario Mundo Deportivo dice de él que es el rey de oros,
copas, bastos y espadas: el rey de la baraja.
Es también histórico este partido por
ser el último de los 156 en que Machís ha vestido de rojiblanco. Ya no volvió a
jugar ni un minuto en los tres partidos que faltaban para terminar la liga y en
el mes de junio ha sido traspasado al fútbol mejicano, terminando así una
relación de diez años con nuestro equipo que en este último ejercicio ha sido
decepcionante, pero que deja más luces que sombras.
«El Granada vuelve a notar el aire en las velas», escribió Rafa Lamelas en la crónica del partido para Ideal.
Por su parte, Mundo Deportivo tituló «Set, partido… y vida extra para el
Granada». El resultado era crucial para los dos contendientes, más
para los nuestros, que ocupaban puesto de descenso, del que con los tres puntos
logró salir. A la semana siguiente un nuevo triunfo sobre el Bilbao pareció
dejar amarrada la permanencia y el granadinismo pudo por fin sonreír en una
temporada para olvidar, pero cuando lo tenía todo a favor a pesar de la derrota
en casa del Betis de la jornada 37, y dependía de sí mismo, en el último
partido, en casa frente al Español, de forma cruel volvió a maltratar a su
sufrida parroquia con un resultado frustrante de empate sin goles y con un
descenso, el décimo de la historia.
LOS QUE HICIERON
HISTORIA EN EL GRANADA CF
Luis Manuel Arantes Maximiano
Abundantes fueron los fichajes del
Granada cara a la temporada 2021-22, sumando las incorporaciones de verano y
las de invierno. Un total de 12 caras nuevas. La mayoría de los nuevos poco han
aportado y con escasísimas excepciones, no ya no han mejorado, ni siquiera han suplido
a los marchados. Uno de los huidos en el interregno de la temporada que nos
ocupa y la anterior fue el portero Rui Silva, al que aquel que viniera a
sustituir tenía muy difícil hacer olvidar. Sin embargo, el que ha sido portero
titular del Granada 2021-22 sí que ha conseguido plenamente que no nos
acordáramos de su compatriota. Maximiano es sin lugar a dudas el mejor fichaje
del Granada de esta temporada y de no haber sido por él es más que probable que
el descenso hubiera llegado inapelable algo antes de lo que lo ha hecho.
A mediados de agosto quedaba cerrado el
fichaje por el Granada de este guardameta de magnífica planta, 1,90 de estatura
y sólo 22 años. Cuatro millones y medio, más variables, abonó el GCF a su club
de procedencia, el Sporting de Lisboa, con el que sólo en la 19-20, con 20
años, fue titular, disputando nada más que dos partidos de la 20-21, siempre
como suplente del ex atlético Adán. La primera opción para la portería del
Granada era Álvaro Fernández, descartado porque el Huesca pedía 10 millones, y
también sonó el veterano (34) argentino, ex del Manchester United, Sergio
Romero.
Fue el único de los incorporados en
verano por el cual hubo que pagar, empleando en la operación parte de lo que le
corresponde al Granada después del acuerdo de LaLiga con el fondo de
inversión CVC.
Las tres primeras jornadas el portero
titular fue Aarón, y el debut como rojiblanco de Maximiano se produjo en la
jornada 4, con visita al Nuevo Los Cármenes del Betis, que ganó 1-2 y cuya
portería la defendía aquél a quien dio el relevo, Rui Silva, silbado en más de
una ocasión por parte de la hinchada, que no acepta de buen grado que saliera
del club sin dejar ni un céntimo a cambio. Maximiano hizo paradas de gran
mérito a tirazos de los varios crakcs con que cuentan los verdiblancos, sin
embargo, mereció de la prensa local el “pero” de que se le vio algo torpe con
el balón en los pies. En su segundo partido defendiendo la meta rojiblanca, en
el Camp Nou, fue fundamental para mantener la ventaja del madrugador gol
rojiblanco ante los asedios locales, y gracias a su excelente trabajo bajo
palos a punto estuvo nuestro equipo de repetir la hazaña de la temporada
anterior y volverse con los tres puntos. A partir de ese partido, cualquier
reticencia sobre sus prestaciones como guardameta desaparecen en la prensa e
invariablemente en cada partido es calificado con nota alta en las crónicas de
los plumillas locales, a lo que viene a añadir más méritos el hecho de que la
tónica general de la temporada ha sido la de los errores de bulto de las
distintas coberturas rojiblancas que a lo largo de las 38 jornadas han sido
alineadas y que con frecuencia eran solucionados por las acertadas
intervenciones de este excelente portero.
Hay portero para rato. A su buena colocación
añade buenísimos reflejos y una gran agilidad, además da espectáculo volando e
interceptando balones imposibles con paradones de portero caro. Decimos que hay
portero para rato, pero, ya se sabe, si nuestro equipo no vuelve pronto a la
élite, difícil va a ser retener a este guardameta de enorme proyección cuyo
nombre sonó varias veces a lo largo de la temporada como posible para ser
enrolado en equipos grandes españoles y europeos.