HISTORIA DEL
GRANADA C.F.
Capitulo
14
Temporada
1945-46
CUANDO EL GOBERNADOR CIVIL NOMBRABA LOS PRESIDENTES
La dimisión del presidente Pérez de Haro en los
vestuarios del Metropolitano madrileño no se plasma en hechos reales. El primer
día de la presente temporada, el 1 de julio de 1945, se reúne la junta y
acuerda pedir ayuda al más deportista de los gobernadores civiles que ha tenido
la provincia de Granada. Para ello se nombra presidente de honor a dicho
gobernador que se llama José María Fontana Tarrats y era un falangista catalán
aficionado al deporte que, entre otras cosas, construyó el Estadio de
La otra decisión de aquel día de verano fue la de crear una Comisión que estudiara el problema económico.
El parto de la comisión
Dos ideas geniales se le ocurrieron a la recién nombrada Comisión.
- Pedir al gobernador que pague con dinero contante y sonante las deudas más perentorias de la entidad.
- Que se autorice la emisión de obligaciones hipotecarias sobre el campo de los Cármenes, amortizables en 25 años.
Y al mismo tiempo se acuerda no aceptar la renuncia del entrenador Emilio Vidal y renovarle el contrato.
El Gobernador nombra al presidente
Parece que ninguna de las ideas expuestas por
Entonces el gobernador Fontana se pone al mando del asunto con la autoridad que en aquella época tenía un gobernador civil y jefe provincial del Movimiento. O sea, toda la autoridad a nivel provincial.
Fontana convoca una reunión donde nombra, por su cuenta y riesgo, nuevo presidente en la persona de Manuel Fernández de Prada y Villarreal, marqués de las Torres de Orán. El marqués, que no tenía el menor interés en ser presidente del Granada, debe obedecer la orden y se pone a revisar los papeles del Club. La primera sorpresa desagradable es que con 60 pesetas en caja hay que pagar en breves días 150.000. Con la ayuda de Fontana, se pagan. Y además se renuevan las fichas de Millán y González (ver la sección “Los que hicieron la historia del Granada C.F.” del capitulo anterior, donde González cuenta cómo fue esa renovación).
También se resuelve el problema del entrenador con
la contratación de un viejo conocido: Ignacio Alcorta “Cholín”, que firma en
blanco y además comenta que el sueldo de entrenador es demasiado exagerado. En
la parte deportiva promete volver a la antigua forma de jugar del Granada, a
base de pase corto y a nivel del suelo.
Una directiva de nombres ilustres
En estos días se ha completado la directiva, llena de nombres ilustres del comercio y la “buena” sociedad. Vale la pena recordarlos para demostrar, una vez más, que muchos personajes de relumbrón no son necesariamente los mejores directivos de un club de fútbol.
Tras el presidente, que todos llaman “el marqués”,
hay tres vicepresidentes: José María Dávila, José Méndez Fernández-Fígares e
Indalecio Romero de
Puedo afirmar y afirmo que algunos de estos flamantes directivos no habían ido al fútbol ni siquiera como espectadores.
Y lo que tenía que pasar pasó. El marqués no aguanta
más de 40 días en el cargo y dimite el 14 de septiembre, nueve días antes de
empezar
La plantilla
Con tantos problemas, casi nadie ha tenido tiempo de pensar en la formación de una plantilla capaz de dar el salto de nuevo a 1ª división. Se quedan la mayoría de los jugadores y mucha gente se convence de que ésa es la mejor manera de subir. Pero la cosa se tuerce porque, por uno u otro motivo (económico casi siempre), en octubre Nicola es traspasado al Hércules y en diciembre Milito queda sorprendentemente en libertad (seguramente la compró) y ficha por el Castellón primerdivisionista. Esto significa que se han ido dos jugadores fundamentales y el equipo se ha debilitado notablemente.
Para sustituir a Nicola viene del Murcia Portilla, que juega tres partidos, marca dos goles y se descubre que tiene una lesión en el menisco externo de la rodilla derecha. Se opera a fines de noviembre, reaparece en febrero, juega dos partidos… y se acabó Portilla. No hay delanteros centros en la plantilla y se recurre a Sosa hasta que llega, cedido por el Real Madrid, el vasco Zubizarreta que a pesar de sus goles en los primeros partidos no llegó a ser el hombre que el Granada necesitaba imperiosamente.
Para cubrir la baja de Melito llegó Palacios del
Sestao. Tuvo cuatro partidos para demostrar su valía y terminó cediendo el
puesto a Rey, que ya había jugado de medio centro, estaba en el Granada y era
la solución más adecuada.
La Liga
Irregular es el calificativo que mejor describe el
camino del Granada por
Las alineaciones demostraron que el equipo titular estaba prácticamente hecho pero que la ausencia de Nicola y Melito fue fundamental. Hubo puestos casi inamovibles como el terceto defensivo de Martí, Millán, González. Sosa y Sierra fueron los habituales medios alas con Melito primero y Rey después en el medio centro, salvo la efímera presencia de Palacios.
En la delantera la posición de extremo derecha estuvo repartida entre Marín, Aparicio y García mientras que a la izquierda Paco Más no se perdió un partido, igual que Trompi en el puesto de interior derecha, con una sola ausencia. Safont y Galvany se alternaron casi a partes iguales en el interior izquierda mientras que en el centro del ataque fue Zubizarreta el más habitual desde que se incorporó al equipo, aunque también pasaron por el puesto; Nicola, Sosa, Safont, Portilla y Marín.
No se pudo repetir la hazaña de la temporada anterior porque, tras eliminar al Tarragona de primeras, el Valencia volvió ser verdugo de los granadinos con un 4-1 en Mestalla y una mínima victoria local por 1-0 en los Cármenes en el encuentro final de la anodina temporada.
Altas y bajas
El 29 de mayo se remodeló una parte de la directiva y entró de nuevo Paco Cristiá junto a un vocal de remoto recuerdo: Rafael Peregrín, el primer capitán del Recreativo. Cristiá al tomar posesión anunció que el club debía 500.000 pesetas y que solo se contaba con 700 socios.
El despido de Cholín, un mes antes acabar de temporada, el 1 de junio, y ya sin partidos oficiales que disputar, fue un mal detalle para el hombre que tanta honradez y cariño demostró en todas las ocasiones, y fueron bastantes, que estuvo al servicio del Granada en distintos puestos de trabajo. Antonio Conde, otro histórico del Club ocupó su puesto técnico.
Pero el cambio más trascendente de este final de temporada es el fichaje de Paco Lesmes. Nadie le dio excesiva importancia, pero Lesmes fue enseguida uno de los mejores jugadores que han pasado por las filas granadinas. Estaba haciendo la mili en Ceuta y lamentablemente no se consiguió su traslado a Granada hasta un año después. Se perdió la próxima temporada, la 1946-47, pero el acierto de su fichaje no admite la menor duda.
* La renovación del contrato de Millán y González dio mucho que hablar durante el verano. El escándalo fue mayúsculo cuando “Ideal” publicó que González pedía 250.000 pesetas por una temporada, que era una cantidad realmente exorbitante para la época. Seguramente el periódico agregó, sin darse cuenta, un cero de más a las 25.000 pesetas anuales por las que finalmente firmó el defensa tras una durísima negociación con el marqués de las Torres de Orán. Es la misma cifra que cobró Millán tras renovar por tres temporadas. Iguales los dos y con el mismo sueldo de 1.500 pesetas mensuales. González adujo en la discusión que el Barcelona le ofrecía un “suculento contrato”. Nunca sabremos si era un simple farol, aunque debemos recordar que tanto Millán como González tuvieron “suculentas” ofertas en muchos momentos de su permanencia en el Granada.
* El cronista de “Patria” que presenció la prueba de tres canteranos; Rufino, Cepillo y Ballesta, durante un amistoso el 14 de septiembre, dijo que “ninguno servía para el Granada”. Y sería verdad porque ninguno fichó ni llegó a destacar posteriormente.
* El Hércules pagó 80.000 pesetas por el traspaso de Nicola. El ariete no triunfó con los alicantinos y fue traspasado al Murcia. En Granada se le echó mucho de menos y dejó un hueco difícil de cubrir.
* Luis Marín, el gran extremo, es expulsado por primera vez en su vida, a los 40 años de edad. Durante un lance del partido Granada-Santander fue agredido por el aragonés Ameztoy, Marín repelió la agresión y el árbitro Álvarez Santullano le mandó a la caseta. Y la verdad es que Marín estaba seriamente lesionado y debió permanecer mes y medio en el dique seco como consecuencia del daño causado por Ameztoy.
*
Esta fue la quinta y última temporada de Marín en el Granada, a donde llegó con
35 años y fue uno de los jugadores que más rindió en el campo y más agradó a
los aficionados por su calidad y educación. Aún tuvo fuerzas para seguir una
temporada más como jugador-entrenador del Antequerano. Y hasta llegó a salir a
hombros de la afición de Antequera tras un partido triunfal. ¡Grande Marín!
*
El encuentro Zaragoza-Granada no se pudo jugar el domingo 20 de enero de 1946
porque el campo estaba muy nevado. Se jugó el marte siguiente y los maños
ganaron por 2-1. Una noche más de hotel maltrató la ya maltrecha economía del
Club y encima González fue expulsado por el árbitro Trías en una jugada donde
no había intervenido. El Granada elevó la reglamentaria protesta y
* El Granada hizo la temporada con muy pocos jugadores. La estadística dice que fueron 19, pero realmente eran 17 ya que Nicola-Portilla y Melito-Palacios no llegaron a coincidir en el tiempo. Quizás sea la temporada donde el Club ha tenido una plantilla más corta. Una de las razones por las que esto fue posible es que Millán y Más jugaron todos los partidos y Trompi y González solo faltaron en uno.
* Martí fue un guardameta muy irregular al que se acusó en la pasada temporada de la derrota en la promoción ante el Celta. Pero, como Floro tampoco andaba muy fino, el entrenador Cholín le dio la titularidad. Cuando el Santander venció por 3-2, el 3 de febrero, Cholín perdió la paciencia y declaró que el tercer gol santanderino había sido culpa de Martí y de “su enfermiza obsesión por componer la figura en lugar de ir a lo práctico”. Pero lo mantuvo en el once titular y finalizó su etapa en el Granada encajando un increíble gol en un descomunal fallo ante el Coruña. Los gallegos ganaron por 1-2 en los Cármenes porque Martí encajó un gol dejando pasar el balón entre las piernas.
* Aquel partido contra el Coruña era fundamental para alcanzar el ascenso directo con el segundo puesto o, al menos, el derecho a la promoción, con el tercer lugar. Se jugó el 3 de marzo de 1946 cuando solo quedaban cuatro jornadas para terminar el torneo. Los jugadores estuvieron recluidos en el Albergue de Educación y Descanso en Sierra Nevada porque era imprescindible ganarle al Coruña… pero no se pudo.
Ascendieron Sabadell y Coruña, y el Tarragona jugó
la promoción que no ganó. Si el Granada le hubiera ganado al Coruña y todos los
demás resultados hubieran sido iguales, habría conseguido el ascenso directo en
el segundo lugar de la tabla con 32 puntos. El Sabadell siempre en cabeza con
35 y el Coruña, tercero con 30 puntos. Pero incluso con el empate, la
clasificación hubiera sido: Sabadell 35, Coruña 32, Granada 30 y Tarragona 29.
Y se habría jugado la promoción.
LOS QUE HICIERON HISTORIA EN EL
GRANADA C.F
Francisco Mas Piquet
Paco Mas era una gran figura del fútbol español de la posguerra. Con el Español de Barcelona fue campeón de Copa en la temporada 1939-40 y subcampeón del mismo Torneo en la siguiente.
Por eso, su ingreso en el Granada C.F. en la temporada 1942-43 fue una auténtica bomba. Mas, que había sido pretendido por el Barcelona, recaló en un club que añoraba a un extraordinario Camilo Liz, y el catalán tenía muchas papeletas en contra para hacer olvidar a su antecesor. Le costó trabajó convencer a la afición y a los entrenadores. Primero estuvo dos temporadas alternando con Aparicio y luego, a la tercera va la vencida, fue la permanente referencia del Granada en la posición de extremo izquierda.
En su última temporada, la desastrosa de 1951-52,
pasó del césped a los despachos como integrante de
Paco Mas fue un jugador hábil y cerebral al que a
veces se le acusó de pasotismo Sin llegar a calar tan profundamente como otros
jugadores de más carisma, fue querido y respetado por todos y dejó un grato
recuerdo tras jugar 226 partidos con el Granada, por su calidad futbolística y
humana.
La renovación absoluta emprendida por el tándem presidencial Osorio-Dávila en 1952 se llevó por delante al jugador Paco Mas, que renunció a los dos años de contrato que le quedaban, pasando a entrenar al filial Recreativo. Con una plantilla muy renovada, los recreativistas vivieron momentos de gloria en esta temporada y hasta uno de sus delanteros, el extremo Díaz Cara, fue noticia nacional cuando en la cuarta jornada de liga era el máximo goleador nacional de todas las categorías, con nueve tantos en cuatro partidos.
Paco Más tuvo su merecidísimo homenaje el 15 de mayo
de 1953 y se marchó a su Barcelona natal tras once años en Granada, dejando
atrás la casa que tanto le gustaba y que habitó en el barrio de